Equilibrar las hormonas

Los desequilibrios hormonales son provocados por una mala alimentación. Si come azúcar producirá más insulina, más estrógeno y más testosterona. Cualquier tipo de harina y azúcar puede provocar estos desequilibrios. Los lácteos y el gluten pueden desencadenar la inflamación y los desequilibrios hormonales. Los xenobióticos o químicos ambientales como los pesticidas en nuestra comida pueden actuar como poderosos disruptores hormonales y desencadenar el desbalance de nuestras propias hormonas.

Los productos lácteos son uno de los mayores desencadenantes de los desequilibrios hormonales debido a todas hormonas que se encuentran naturalmente en la leche. Incluso la leche orgánica puede provenir de vacas preñadas, aumentando los niveles hormonales.

De hecho , los lácteos tienen más de 60 hormonas que pueden contribuir a los desequilibrios. Los lácteos se encuentran entre las sensibilidades alimentarias más comunes que podría beneficiarse al eliminar de su dieta.

Consuma un dieta completa, real, sin procesar, orgánica, principalmente en base a plantas, con productos de origen animal orgánicos o criados manera sostenible.

Cuando se concentra en este tipo de dieta, minimiza la ingesta de xenoestrògenos, hormonas y antibióticos. Tomar pasos simples como elegir alimentos orgánicos y beber agua filtrada puede afectar enormemente el desequilibrio hormonal.

Para restablecer las hormonas femeninas, concéntrese en alimentos específicos que equilibren las hormonas. Aumente ciertos alimentos como semillas de linaza, verduras crucíferas, grasas buenas y alimentos de soya integral orgánico no transgénicos tradicionales (tofu, tempeh, miso, natto y edamame). Agregue 1 a 2 cucharadas de semillas de lino molidas al día a su dieta, para reequilibrar sus hormonas además de comer bien, mantenga una vida activa.